viernes, 30 de noviembre de 2007

MUSICA PARA CAMALEONES

espaciarse lento, sumergirse.musica para camaleones, disipacion e ilustracion de la bruja.musica para camelones,artificio y combulsion, desmembrar la desilucion.musica para camaleones, huecos y rotos alguna diferencia y por supuesto la rodilla, va por delante, una llamada telefonica. musica para camaleones, una camilla, y las trenzas del verde pasto no dejan que se valla. musica para camaleones hay que curar al enfermo, vete hey. nunca musica para camaleones, no ve que no me gusta camuflarme.dejarlo salir mas bien con frio en las pestañas y las gotas que ascienden, mejor. muisca para camaleones, discrepancia coartada, suelten suelten, musica para camelones, se asoman a la ventana y ahy un sol hundiendose en los arboles, cargado de musica para camaleones, soltar hacer de tripas corazon. musica para camaleones, constitucion de Anaximandro o es acos el hilemorfismo, desconstitucion sì: dilucidacion, desmbembracion, musica para camaleones. NO HAY QUE TIRARLE PERLAS A LOS CERDOS-.....

martes, 13 de noviembre de 2007

palabras al megafono; mano quebrada

Siempre vamos a saberlo. Nunca el dolor va a ser una excusa para hacer de las escaleras alfombras. Entonces de que sirve una vida, si es para quedarse con la sopa servida, con los caprichos y el cabello largo. ¿Mentirse? ¿Mentirnos? No lo creo. Somos más fuertes de lo que imaginamos y crear con las manos untadas no es una excusa, hay que dejar que hasta la cara se nos manche con las cicatrices que deja el sol. ¿Qué si soy partidario de lo limpio? Emanciparse con suavidades de este mundo no cabe. La tierra muda de piel, esta pariendo un corazón. Pareciera que no lo supieramos. Lo vamos a saber siempre, y no dejan de reiterárnoslo, los pozos hondos del dolor, las fotos de de otra época, de un puente y de algo que no se va a quebrar porque ya partió. ¿Nos vamos a sentir mejor si nos besan las heridas, donde tanto arde el cuerpo?

Voy a delimitar la imagen. Imagine un lienzo, más blanco que cualquier sabana, donde hay dos hombres y una mujer pintados, de espaldas al espectador, en media luna, mirándose y permitiéndonos verles el perfil del rostro, pero sin dejar de mirar a un hombre del que solo vemos la espalda. Los tres pintados con un trazo perfecto con lapicillo azul, sin saber porque están ahí, en un cuarto con las paredes blancas, parados sobre la baldosa de cuadros azules y blancos que termina dando espacio al espacio, a que la intuición que les negó el cosmos una vez, se desarrolle con total libertad de sus intenciones.
Muy seguramente para ellos llegar hasta esta sala debe ser angustiante y no menos producto de malos días, días que son como la Venus de Milo manca que todos conocemos, aun así hermosa e inmortal.

jueves, 8 de noviembre de 2007

LUCIERNAGA PARA LA NOCHE


Tenía los labios secos. Abruma la tensión. El mal genio. Un punto iletrado sin giro. Sensación de retroceder, de arena en los resquicios. Piel de cangrejo. Devolver, no desanudar, dejar los cabos atados cuando se debe partir. Fue un puerto. El día ayer. Costumbre de asombrarse ante la costumbre de los detalles sutiles cambiando en la mascara de tu cara. Constante retroceder. Tenía los labios secos. No hubo palabra. Oportunidad imposible de girar. De sacudir la arena. De saltar el lazo. De aplastar ese cangrejo. De soltar tan sencillo el nudo. Dejar irse a un barco repleto de siniestros. Como si los siniestros fueran bolitas de pelo pinche con ojitos blancos y patitas de hilo de lápiz. Son siniestros, así, siniestros.

Las canciones de tres minutos, más largas a partir de hoy cuando torcí diferente. Haciendo escándalo, viendo aparecer árboles brotando velozmente contra la nada, figuras amorfas saliendo de sus corazones, revestidas en su sábila, Ángela alemana ángel una vez mas entre estas cenizas y estas escenas donde comemos hígado. Regar las cenizas por el papel, mancharlas en excusas, con sangre en polvo y brazos abiertos y cuerpos de lado. Punto iletrado sin giro. Luego conciente. Después muerto viviente. Después estable leyendo. Punto iletrado sin giro. En esta habitación oscura por las cortinas.

En la cornisa atisbo a alguien mágico, de sonrisa perfecta, apenas una ilusión. Porcelana. Pero creo que por fin soy: L.I.B.R.E y por estos días desamarraré tu bote de mi puerto, lleno de siniestros que se inundarán antes de que los perdamos de vista por la niebla.

Hasta luego y Bienvenida.